Cómo mejorar tu historial crediticio

Hay muchas formas de mejorar tu puntaje crediticio. Desde pagar deudas y reducir la utilización de tu crédito hasta simplemente hacer pagos de facturas a tiempo cada mes. A continuación te presentamos siete consejos para mejorar tu historial crediticio.

1. Verifica tu informe de crédito para ver si hay errores

Uno de cada cinco consumidores tiene un error en sus informes de crédito, y cuatro de cada cinco que los disputan ven cambios en sus informes después.

Si identificas un error en tus informes crediticios, deberás seguir el proceso para disputar errores en los informes crediticios, que es una de las formas más fáciles de mejorar el puntaje crediticio y no toma mucho tiempo.

2. Manten las cuentas abiertas en buen estado

Los prestamistas transmiten la información de la cuenta a las principales agencias de crédito todos los meses. Y cuantas más cuentas o líneas comerciales tengas en regla, más información positiva se encontrará en tus informes crediticios. Esto diluirá los registros negativos o ayudará a expandir el historial crediticio limitado.

3. Obten una tarjeta de crédito asegurada

Si tienes mal historial crediticio y no puedes obtener una tarjeta de crédito “ regular ”, abre una tarjeta de crédito asegurada. Las tarjetas de crédito aseguradas son más fáciles de obtener que la mayoría de las otras tarjetas de crédito porque requieren un depósito de garantía reembolsable, cuyo monto generalmente actúa como el límite de gastos.

También puedes aumentar tu límite de gastos simplemente agregando a tu depósito, lo que puede mejorar un poco tu puntaje crediticio. Cuando cierres tu cuenta, recuperarás tu depósito, menos los saldos pendientes y los cargos financieros.

4. Manten baja la utilización de tu crédito

Trata de mantener un índice de utilización del crédito por debajo del 30% en cada una de tus tarjetas de crédito. Y si realmente deseas maximizar tu puntaje crediticio, apunta a menos del 10%. Un índice más alto perjudica tu puntaje crediticio, ya que indica que estás muy limitado financieramente.

La utilización del crédito se determina comparando el saldo que figura en tu estado de cuenta mensual con tu crédito disponible. Puedes mejorarlo gastando menos cada mes, solicitando un límite de gasto más alto o pagando tu factura varias veces al mes para mantener el saldo de tu estado de cuenta lo más bajo posible.

5. No cierres cuentas no utilizadas

Es más probable que los prestamistas, propietarios, empleadores y otros tomadores de decisiones que se sabe que realizan verificaciones de crédito confíen en los solicitantes con un largo historial de administración responsable del dinero. La información positiva en tus informes crediticios sobre préstamos y líneas de crédito abiertos recientemente te ayudará. Pero tienes que demostrar que eres capaz de hacer pagos a tiempo y de mantener tu parte del trato del préstamo a lo largo del tiempo.

6. Desarrolla un historial crediticio extenso

Un gran crédito disponible y un historial crediticio extenso son esenciales para una excelente calificación crediticia. Por eso no es aconsejable cerrar cuentas antiguas, incluso si ya no las usas. El cierre de cuentas reducirá tu crédito disponible, aumentará tu índice de utilización de crédito y dará la impresión de que tienes poca experiencia crediticia.

Sin embargo, no debes pagar una tarifa anual para mantener abierta una cuenta no utilizada. Por el contrario, debes cerrar las cuentas que te están costando dinero y usar los ahorros para pagar deudas o crear un fondo de emergencia.

7. Automatiza tus pagos

A algunas personas les cuesta recordar pagar las facturas de sus tarjetas de crédito a tiempo. Si tu eres uno de ellos, contacta a la compañía de tu tarjeta de crédito en línea y pídele que realice automáticamente los pagos mensuales de tu cuenta bancaria.

Otros se ven tentados por las tarjetas de crédito a gastar en exceso e incurrir en deudas innecesarias. Si tu eres así, la solución correcta no es necesariamente cerrar todas tus tarjetas de crédito, sino mantener algunas de ellas abiertas pero encerradas en un cajón (o incluso cortadas en pedazos) para evitar usarlas. Sin embargo, antes de hacerlo, asegúrate de que la compañía de tu tarjeta de crédito no cierre tu cuenta si no la usas durante mucho tiempo, lo que se indicará en el contrato.

Ahora ya conoces estos consejos que te ayudarán a que tu historial crediticio siempre se encuentre en mejores condiciones. Si tienes algún otro consejo, no dudes compartirlo con nosotros.