Ahorrar dinero es un reto difícil para muchos de nosotros, sobre todo cuando tenemos deudas y gastos fijos. Estas son algunas de cosas que puedes hacer para aumentar tus posibilidades de ahorrar dinero con éxito. No solo para tus objetivos a corto plazo, como unas vacaciones, sino también para los de largo plazo, como la constitución de un depósito para la vivienda:
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Haz un presupuesto
El núcleo de cualquier plan de ahorro es un presupuesto. Elaborar un presupuesto te ayuda a priorizar tus gastos y a encontrar un equilibrio entre los gastos y los ahorros a lo largo de todo un año. Comprobando los extractos de las tarjetas de crédito, las facturas, los extractos bancarios y los recibos, puedes calcular todos tus gastos habituales, como el alquiler o el préstamo hipotecario, el transporte, el seguro y la electricidad.
Deduce estos gastos de tus ingresos: tu trabajo a tiempo completo o parcial o tu trabajo ocasional, la pensión, las prestaciones públicas, las pensiones alimenticias, las inversiones, etc.
Controla tus gastos
A veces podemos caer en la trampa de pensar que gastar en cosas grandes es lo que nos mete en problemas, cuando a menudo son las cosas pequeñas las que acaban costándonos más.
Por eso es importante controlar los gastos diarios para no vivir por encima de nuestras posibilidades. Tu extracto bancario te dirá cuánto dinero entra en tu cuenta y cuánto sale. Puedes compararlo con tu presupuesto para ver si lo estás cumpliendo o no. Así podrás identificar las áreas en las que puedes ahorrar. El mero hecho de tener que hacer un seguimiento de nuestros gastos puede alejarnos de las compras impulsivas.
Controla tus impulsos
Las tarjetas de crédito, los cajeros automáticos y las compras por Internet hacen que sea más fácil que nunca gastar dinero. Especialmente en cosas que deseamos más que en las que necesitamos; la medida en que sucumbimos a la tentación suele reducirse a nuestra fuerza de voluntad. Los estudios han demostrado que el autocontrol es un poco como un músculo que se cansa con el uso.
Irónicamente, es la fuerza de voluntad de los compradores más pobres la que tiende a agotarse más. Esto se debe al hecho de que se enfrentan a repetidas y difíciles decisiones financieras.
Paga tu tarjeta de crédito
Con los tipos de interés de las tarjetas de crédito, que alcanzan el 25% o más, es fácil ver cómo el uso precipitado de una tarjeta de crédito puede socavar hasta el más modesto de los objetivos de ahorro. Aunque seamos sinceros, solicitar tarjeta de crédito es una gran opción que puede salvarte de varios apuros. Pagar la tarjeta de crédito en su totalidad y a tiempo es la mejor manera de evitar los cargos por intereses y las comisiones por retraso en los pagos.
Para evitar no pagar las cuotas, te recomiendo domiciliar el pago y debes pagar más del mínimo exigido, pues de lo contrario acabarás pagando muchos más intereses. Una forma creativa de ahorrar dinero es utilizar más la tarjeta de crédito.
Planea tus comidas
Planificar las comidas es una de las formas más fáciles de ahorrar dinero. Si sabes lo que vas a comer durante la semana y has hecho la compra en consecuencia, no habrá necesidad de hacer visitas al azar al supermercado. Las visitas extra hacen que gastes más dinero e incluso que desperdicies comida. Te resultará aún más fácil ceñirte al presupuesto comprando todos tus artículos básicos en tiendas de menor precio.
Ahorrar dinero puede resultar una tarea ardua de todos los días pero te aseguro estarás orgulloso de los resultados a corto y mediano plazo.
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